No lo conté ayer pero he estado unos días de descanso en la sierra, rodeada de montes. Unos días desconectada del mundo, sin ruido, sin reloj, sin radio, sin ordenador y hasta sin cobertura en el móvil; televisión si tenía pero no me he sentado a verla ni un minuto aunque no lo creáis. Ha sido toda una cura de desintoxicación, unos días para relajarse y dejar los problemas, el estrés y todo lo que hacen mi día a día, a un lado.
Me ha faltado hacer un poco de senderismo porque donde estaba había una de estas rutas, pero como me fui con poco equipaje pues no llevé calzado apropiado y tampoco es plan de fastidiarse los pies.
El caso que me ha venido de maravilla, he llegado con las pilas bien cargadas de energía.
No he podido hacer muchas fotos porque donde yo estaba solo se veía monte por todas partes. Ahí tenéis una foto de lo que yo veía al salir de la casa
Pues esta era la única visión que tenía mirara para donde mirara. Así que como las fotos no se iban a diferenciar mucho unas de otras pues tampoco hice muchas, el resto de todo el reportaje fotográfico es en la casa y en la piscina que tiene. Algunas mas hice en el pueblo para tener un bonito recuerdo.
Probablemente os preguntareis que donde es esto, pues he estado en Cortegana, provincia de Huelva. Un lugar ideal para descansar de verdad.
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