¡Hoy puede ser un gran dia!

Y tanto que puede serlo, desde luego para mi no creo que hoy lo sea, hace un rato hablaba con mi amigo, me preguntaba que tal había pasado el fin de semana, y mi respuesta ha sido que se podía haber mejorado, y es que últimamente creo que ando un poco apática, la verdad es que no tengo muchos motivos para estar como unas castañuelas sino todo lo contrario, estas dos ultimas semanas me han pasado cosas que te desencajan y bueno..., hacen que te enfades. Ya sé que no sabéis de que hablo pero tampoco hace falta. Estos días en los que necesitas a la persona con quien compartes tu vida mas que nunca te das cuenta de que no está de la manera que tu necesitas, y esto hace que pienses muchas cosas. Hace tiempo que me he dado cuenta de que los dos vemos las cosas de distinta manera, y eso es complicado, porque esto hace que discutas por cosas sin trascendencia así que cuando aparecen problemas es aún peor.
¿Has sentido alguna vez la necesidad de romper con todo lo que te rodea y empezar de nuevo? yo si, muchas veces, es mas creo que debería haberlo hecho hace tiempo. Te pasas la mayor parte de tu adolescencia programándote un futuro, teniendo sueños, en definitiva, marcándote metas en la vida, y luego te das cuenta de que esa carrera de fondo que te habías planteado, se vuelve una carrera de obstáculos, donde cada vez te cuesta mas saltar el siguiente y donde vez la pancarta de "llegada a meta" a lo lejos, inalcanzable, y lo peor es que ni siquiera tienes la posibilidad de tener alguien al lado alentándote y dándote ánimos, transmitiéndote sus fuerzas para que las juntes con las tuyas, sino que tienes a ese "Pepito grillo" detrás del cogote diciéndote "¡pero donde vas, no sabes que no vas a llegar nunca!" y entonces tus fuerzas empiezan a flaquear, pero sigues y sigues, porque quieres alcanzar la luz, necesitas saber que tu puedes...